Kimchi

Partimos la col en cuatro y retiramos las partes más duras. Cortamos transversalmente las hojas en tiras de unos 3 cm de ancho.

Colocamos en un cuenco de metal grande en capas, alternando col y una buena capa de sal. Cuando tenemos toda la col en el cuenco lo mezclamos bien todo con las manos y cerramos el bol con una tira de film plástico. Dejamos que repose entre 12 y 24 horas a temperatura ambiente.

Pasado ese tiempo, la col habrá “sudado” una buena cantidad de agua. La lavamos bajo el grifo varias veces y la escurrimos muy bien en un escurridor.

Preparamos ahora la mezcla añadiendo todos los ingredientes a un vaso de batidora. Trituramos y mezclamos durante el tiempo necesario hasta conseguir una pasta homogénea.

Preparamos el resto de vegetales: pelamos la zanahoria y la cortamos en tiras muy finas de unos 3 cm de largo. Lavamos los cebollinos, retiramos las partes verdes más duras y cortamos también en tiras finas. Si vamos a poner daikon, lo pelamos y lo cortamos en láminas finas y no muy grandes.

En nuestro cuenco de metal ponemos una capa de col y del resto de verduras y una parte del adobo y mezclamos con la mano para que se recubra bien toda la superficie de los vegetales (es aconsejable usar guantes de plástico desechables). Vamos añadiendo capa a capa hasta usar todos los ingredientes. Se podría haber mezclado todo de golpe, pero la idea de hacerlo capa a capa nos garantiza una distribución perfectamente homogénea de todos los ingredientes.

Ahora nuestro Kimchi tiene que fermentar. Lo ideal es dejarlo en un frasco de fermentación o en un bote de cristal con tapa durante una semana en un lugar fresco (entre 12 y 20 grados). Se puede dejar más tiempo si queremos fermentaciones más intensas. Luego, se pasan el o los frascos a la nevera y ya se puede comer!

Nota: el método más tradicional dice que el kimchi debe hacerse conservando las hojas de col enteras, untando sobre ellas, una a una, el adobo. Es un método algo más trabajoso y que tiene el inconveniente de que luego es más difícil de servir. A cambio, si se usa este método se  pueden usar fermentaciones muy largas con resultados óptimos.