Fermentos ECO para queso y yogur vegano - 1 g
Estos fermentos han sido especialmente seleccionados y elaborados para la elaboración de quesos y yogures veganos. Es apto para veganos, pues a pesar de contener leves trazas de lácteos –por el medio en el que ha sido cultivado-, al comenzar la fermentación de una bebida vegetal, la propia bacteria consume en primer lugar estas pequeñas trazas restantes, eliminandolas completamente.
Se puede usar con distintos tipos de pastas vegetales, como las obtenidas a partir de granos de soja, anacardos entre otros.
Se presenta en un sobre de 1 g de bacterias vivas liofilizadas, 100% puras, sin conservantes, azúcares o aditivos. Cada sobre es suficiente para fermentar de 5 hasta 10 litros de leche, siendo posible reutilizar esta cepa posteriormente mediante resembrados.
Para hacer "yogur", basta con incorporar el fermento con la leche a una temperatura de entre 39 y 45ºC y dejarlo entre 7 y 9 horas manteniendo esa temperatura. Dependiendo del tipo y calidad de la leche vegetal, pueden ser necesarios tiempos más prolongados. A temperaturas cercanas a 39º se desarrolla más el sabor y a temperaturas cercanas a 45ºC se potencia la textura. En cualquier caso, esta será siempre menos densa que la de un yogur hecho a partir de leche animal.
Para conseguir "queso", se debe seguir el mismo proceso que con el "yogur" para luego proceder a escurrirlo y prensarlo. Para conseguir quesos de una mayor consistencia es aconsejable añadir a la leche algún tipo de refuerzo como harina de anacardo o espesantes naturales como la goma guar.
Conservación: Conservar los fermentos en la nevera alargará su vida. Sin embargo, este producto puede mantenerse a temperatura ambiente durante unos días, lo que facilita su envío por mensajería convencional con el consiguiente abaratamiento de costes. Una vez abierto el sobre, se aconseja usar la totalidad de su contenido.
Producto fabricado en Bulgaria por Genesis Laboratories, líder mundial en la conservación y elaboración de cultivos lácticos y probióticos de origen natural y libres de modificaciones genéticas.
Este fermento es una composición simbiótica de las bacterias Lactobacillus Acidophilus, Lactobacillus Bulgaricus y Streptococcus thermophilus, seleccionadas y aisladas a partir de fuentes naturales provenientes de las montañas búlgaras, sin sufrir ninguna modificación genética. Contiene trazas de LECHE y LACTOSA.
