Extracto de vainilla

Una forma de extracto de vainilla se obtiene sumergiendo las vainas curadas en una solución de alcohol y agua. La calidad del extracto depende de varios factores, incluyendo la proporción de vainas de vainilla por volumen de líquido y el tiempo que las vainas se dejan macerar en esta solución. La normativa sobre lo que puede etiquetarse como "extracto puro de vainilla" varía según el país, pero generalmente requiere una concentración mínima de vaina de vainilla por volumen de alcohol-agua. Además de esta versión natural, en laboratorio se ha conseguido recrear la molécula que le da el sabor más característico a la vainilla, abriendo la puerta a la elaboración de extracto artificiales. Hay por lo tanto distintas variedades de extracto de vainilla:

 

Extracto Puro de Vainilla: Este extracto se hace con vainas de vainilla reales y alcohol. Contiene la complejidad completa de sabor y aroma de la vainilla natural.

Vainilla Sintética (Imitación de Vainilla): Hecha a partir de la síntesis química de la vainillina, el principal compuesto aromático de la vainilla. Es mucho más barata, pero su perfil de sabor es menos complejo.

Pasta de Vainilla: Una mezcla espesa que incluye tanto el extracto de vainilla como las semillas molidas de las vainas, ofreciendo un sabor intenso y puntos visuales de las semillas en los platos terminados.

Extracto a base de vanillina: es artificial. Su principal ventaja es su precio, muy inferior al de los productos de origen natural.

 

 

El extracto de vainilla se utiliza en una amplia variedad de productos horneados, como galletas, pasteles, y panes, así como en postres fríos, incluyendo helados y cremas. También es un aditivo popular en bebidas, desde batidos hasta cócteles y cafés especiales. Además de su uso en dulces, el extracto de vainilla puede agregar una dimensión de sabor a platos salados y salsas.