Racletera

La auténtica "racletera" sería una fuente de calor intensa a la que acercamos a un gran trozo de queso de raclette. Puede ser desde la llama de una chimenea o una salamandra eléctrica especialmente diseñada para este fin. Por efecto del calor, la primera capa de queso se derrite y se raspa (racler en francés)  con algún tipo de rasqueta o cuchara y se pasa a la mesa. Pero hacer la raclette de esta manera requiere disponer de grandes trozos de queso, algo no realista ni aconsejable para la mayoría de hogares. 

Por ello, cuando hablamos de racletera, pensamos en un electrodoméstico más fácil de usar.

La racletera o aparato para hacer raclette eléctrico se utiliza también para derrretir el queso suizo de raclette pero usando otra técnica. Para ello, todas las racleteras se presentan con pequeñas sartenes, normalmente recubiertas de material antiadherente, en las que se coloca el queso. La racletera, a modo de grill, derrite el queso que luego se vierte sobre patata cocida.

El aparato se coloca en el centro de la mesa. Al ser eléctrico hay que preveer el tener un alargador lo suficientemente largo y protegerlo bien por si cayera agua (o vino!). Cada comensal debería tener fácil acceso al mismo para ser cada cual responsable de colocar su queso y derretirlo hasta el punto que le guste más.

Cosas a tener en cuenta a la hora de comprar una racletera:

• Número de comensales. Lo normal es que cada comensal tenga su propia sartén para queso y su propio puesto en la racletera. Por ello, es aconsejable que la raclette esté diseñada para un número igual o superior al de comensales (o usar varias racleteras que también es posible, claro). Las más pequeñas suelen para 4 personas y las más comunes son para 6 u 8 personas.
• Potencia: a más potencia, más capacidad para derretir el queso rápido y hacer mejor otras funciones. Busca racleteras con potencia cercana o superior a los 1000W. Y si tiene regulador de potencia, mejor que mejor.
• Otros usos: la mayoría de racleteras se aprovecha para ser también una plancha y para ello llevan los utensilios adicionales necesarios, como plancha de metal o de piedra en la que cocinar carne, verduras, huevos...