Arare
El arare es un snack tradicional japonés crujiente, hecho a base de arroz glutinoso. Lleva el nombre de las pequeñas granizadas de nieve que su forma y textura recuerdan. Aunque simple en sus ingredientes, la diversidad en la textura, el sabor y la forma del arare lo convierten en un aperitivo perfecto y delicioso. Si quieres conocer cn más detalle lo que es el arare y cómo se hace, sigue leyendo este artículo.
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El arare fue creado por primera vez en Japón durante el período Edo (1603-1868), lo que lo hace un snack con una larga historia. Inicialmente, era consumido por los samuráis como una fuente rápida de energía. Con el tiempo, su popularidad se extendió a todas las clases sociales en Japón, evolucionando en una variedad de formas y sabores.
El proceso de elaboración del arare comienza con arroz glutinoso, que se cocina al vapor y luego se amasa hasta formar una pasta homogénea. Esta pasta se extiende y se corta en pequeñas piezas que luego se secan antes de ser fritas en aceite a alta temperatura. Una vez fritas, las piezas se inflan, adquiriendo una textura ligera y crujiente. Finalmente, el arare puede ser sazonado con una variedad de sabores, incluyendo salsa de soja, algas marinas, wasabi, y más, o incluso combinado con frutos secos o pedazos de alga nori para añadir complejidad a su sabor.
Existen muchas variantes de arare, cada una con su propio tamaño, forma, y sabor. Algunos de los tipos más populares incluyen:
Senbei: A menudo más grande y de forma circular, el senbei es un tipo de cracker de arroz que puede ser tanto dulce como salado.
Kaki no tane: Conocido como "semillas de caqui" por su forma que recuerda a las semillas de esta fruta, este tipo de arare es picante y a menudo se mezcla con cacahuetes.
Kompeito arare: Una variante más dulce, a menudo coloreada y con forma de estrella, inspirada en el tradicional dulce portugués kompeito.
El arare no solo se disfruta como aperitivo; también se utiliza como ingrediente en diversos platos japoneses. Por ejemplo, se puede encontrar esparcido sobre el helado para añadir textura o como topping en sopas y ensaladas. Además, es común verlo como acompañamiento de bebidas alcohólicas, especialmente el sake, donde su textura crujiente y su sabor complementan perfectamente la bebida.