¿Que tipo de mortero necesito?
¿Que tipo de mortero necesito?: ¿Cómo se elabora?
Comprar productos
La ventaja de contar con uno o varios morteros en nuestra cocina es que podrás disfrutar de mezclas más finos, más frescas y aromáticas. No es lo mismo picar ajo que triturar ajo. No es lo mismo una pimienta comprada ya molida hace meses que otra recién molida. El mortero te da ese frescor y es por tanto un imprescindible para todo buen cocinero.
Revisemos qué variedad de mortero existen, para qué se usan, cómo se usan y en qué se diferencian. La primera gran diferencia es la que hacíamos en el párrafo anterior: no es lo mismo hacer un majado de ajo y perejil que moler granos de pimienta. Hay morteros y manos que se adaptan mejor a una tarea que a otra.
De madera: el más típico de las cocinas españolas y perfecto para triturar ajos, perejil y otros ingredientes relativamente blandos. Es relativamente económico, ligero y fácil de limpiar, además de coger con el tiempo una pátina que lo hace entrañable. Los mejores y más recomendables se fabrican a partir de madera de olivo, muy resistente y ligeramente rugosa lo que da un buen agarre para el alimento. Se deben lavar a mano con agua tibia y jabón y secar muy bien para evitar la aparición de grietas. Si quieres moler especias duras, no es el más aconsejable. La mano pesa poco para esta tarea y el mortero se te podría romper. Si te gusta moler especias, entonces deberías considerar comprar un mortero de otro material más duro, como metálico o de piedra.
De piedra: ya sea de granito, mármol o de otro tipo de piedra, es un buen todo terreno que te permite hacer majados y también moler especias. Su principal inconveniente es también una de sus principales ventajas: su peso. Al ser muy pesados son muy estables en la mesa a la hora de trabajar. En cambio, son más farragosos a la hora de moverlos o lavarlos. La rugosidad de la piedra los hace adecuados para aplastar y su dureza también tolera golpes. Al obtenerse a partir de piedras muy duras, su precio suele ser medio/alto y si son de mármol aún más.
De metal: llamado almirez, es parecido al de piedra en cuanto a funcionalidad. Suelen fabricarse en cobre y tienen un precio relativamente alto. A cambio también pueden usarse como instrumento de percusión.
De cerámica: usados en todas partes del mundo por la facilidad de producción y bajo coste. Son sin embargo relativamente frágiles y por lo tanto limitados.
De porcelana: muy elegantes y adecuados para triturar presionando y aplastando el ingrediente, pero nunca golpeando dado con corremos el riesgo de romperlo. Usado en farmacia para conseguir polvos muy finos, se le puede dar un uso similar en la cocina.
Suribachi: destacamos este tipo de mortero japonés por su especial acabado. Fabricado en cerámica, la parte interior del cuenco tiene unas estrías que facilitan el triturado del alimento. Es especialmente eficaz para triturar semillas duras y pequeñas como las de sésamo. La mano es siempre de madera para conservar mejor el interior estriado.
