Nevera de maceración para cerveza

Una termonevera para maceración es simplemente una nevera portátil (de estas que nos llevamos a la playa) a la que se le ha hecho un agujero lateral y conectado un grifo para que pueda evacuar el líquido que vamos a meter dentro.

¿Pero, para qué sirve este utensilio? Pues simplemente para realizar la maceración de la malta cuando vayamos a hacer una cerveza todo grano, es decir, a partir de malta partida o triturada. El proceso de maceración consiste en la extracción del almidón de la malta en un baño de agua. Debe realizarse durante tiempos relativamente prolongados ( 1 o 2 horas) y  temperaturas que rondan los 65 grados. Es importante que dicha temperatura se mantenga lo más constante posible durante el proceso y para eso este aparato es muy útil. Es también posible usar la termonevera para hacer recetas que requieren varias temperaturas de macerado que permiten la máxima extracción de azúcares. En estos casos, la variación de temperatura suele ser al alza, algo que se puede conseguir añadiendo agua caliente.

Como hemos dicho, la termonevera ideal debería contar con un grifo lateral desde el que podremos extraer el mosto. Para evitar que el grano de malta se introduzca en el grifo, podremos meter la malta previamente en una bolsa de maceración y luego introdicir esta en la nevera. Existen también termoneveras que cuentas con una rejilla o filtro que evita que el grano salga por el grifo.

Para usar la termonevera deberemos por tanto introducir la o las maltas molidas en la misma, ya sea dentro de una bolsa de macerado o directamente. Luego iremos vertiendo agua caliente y agua templada hasta conseguir cubrir bien toda la malta con un agua a la temperatura deseada. Una vez alcanzada la temperatura objetivo, cerraremos la tapa de la nevera durante el tiempo deseado de macerado. Como hemos indicado antes, si la receta requiriese un macerado con distintos escalones de temperatua, esto se puede conseguir añadiendo agua caliente. Durante el proceso de macerado, la malta no debe

Una vez se ha completado la maceración, la termonevera con grifo nos ofrece otra gran ventaja: colocándola sobre una mesa y poniendo la olla de cocción por debajo, no tendremos más que abrir el grifo para dejar caer el mosto mientras el grano de malta ya usado permanece en la termonevera. Luego procedermos a hacer el "lavado" de la malta que consiste simplemente en verter más agua caliente sobre la malta para arrastrar la máxima cantidad de azúcares. El agua del lavado se deja fluir por el grifo para que se añada al mosto que ya tenemos en la olla. En ningún caso deberemos estrujar el grano de malta para obtener mayor cantidad de mosto. Esta práctica hace que la malta desprenda sabores poco agradables. Por lo tanto, el lavado y la recuperación de más mosto debe hacerse por simple gravedad.

Una vez vertido todo el mosto en la olla, podremos empezar la cocción durante la cuál se añadirán los lúpulos y otros ingredientes que lleve la receta si es el caso.

Por todas estas razones si haces en casa cerveza todo grano con cierta frecuencia, te recomendamos y mucho que uses una de estas neveras.