Dosa

Las dosas se hacen en varias etapas que son poco laboriosas y rápidas pero que tienen largos periodos de espera entre ellas.
Primero de pone a remojo el arroz, las lentejas y el fenogreco durante la noche. A primera hora de la mañana siguiente, escurrimos bien el agua y metemos arroz, lentejas y fenogreco en una batidora. Añadimos la sal y molemos hasta conseguir una pasta homogénea. Debe quedar líquida pero espesa, como una masa de crepes. Si fuera el caso, añadiremos agua hasta conseguir la consistencia buscada. Dejamos reposar y fermentar de 6 a 12 horas en un lugar oscuro, a temperatura ambiente. 
Pasado este tiempo, la masa ya estará lista para hacer las dosas. Deberían haberse formados pequeñas burbujas en la masa, síntoma de que se ha producido la fermentación. 

En una sartén no adherente, ponemos una gotita de aceite y la repartimos bien sobre la superficie. Ponemos masa de dosa en el centro y con la cuchara o cacillo la aplastamos para repartirla bien. Cocinamos un minuto y damos la vuelta a la dosa con una espátula. Cocinamos otro minuto y ya estará lista.