Adornos para pasteles con isomalt

Hacer formas de caramelo con isomalt es rápido y fácil. Basta con calentar una cantidad de isomalt en polvo un una cazuela (sin añadir agua) y esperar a que se derrita. Para conseguir que los caramelos resultantes sean completamente transparentes, debemos asegurarnos de que el isomalt se caliente al menos a 140 grados. 

Luego, podemos verter el caramelo líquido sobre un molde o sobre un tapete de silicona donde solidificará al enfriar. Se pueden hacer todo tipo de formas que serán resistentes a la vez que crujientes si se mastican. El isomalt aporta un sabor dulce sin más, pero le podemos dar más vida aportando color y sabor. Podremos usar cualquier colorante soluble en agua y combinarlo con algún concentrado que nos guste, como por ejemplo un concentrado de frutas. 

Como hemos dicho, si tenemos el molde adecuado, podremos dar forma de caramelo a nuestro isomalt. Pero también podemos hacer formas muy interesantes utilizando simplemente un tapete anti adherente. Simplemente dejando caer gotas de isomalt sobre el tapete podremos hacer unas bonitas gotas dulces. Usando una espátula, podremos crear formas aplanadas que recuerdan a plantas acuáticas y que tendrán la rigidez y resistencia suficientes para poder insertarse sobre un pastel o bizcocho pero que serán perfectamente comestibles.