Aceite de sésamo
Utilizado principalmente en la cocina asiática, este aceite se obtiene del prensado de semillas de sésamo, normalmente tostadas. Tiene un color relativamente oscuro, dependiendo del nivel de tostado previo, y aporta un intenso aroma a sésamo que lo hace ideal para dar sabor y una personalidad especial a nuestro plato. En la cocina china, japonesa y coreana, su función es exclusivamente la de aportar sabor. Se utiliza tanto en crudo como en aliños o incorporándolo a salsas y guisos de todo tipo, pero en cantidades pequeñas.
Son también muy populares los aceites de sésamo picantes (mediante la infusión de chiles) que con unas pocas gotas le darán a nuestro plato un carácter completamente diferente y único. En partes de India se usa este aceite como medio para freír usándose en este caso variedades refinadas del mismo. En Europa, son muchos los chefs que añaden unas gotas de aceite de sésamo a sus aliños para las ensaladas, con unos resultados exquisitos. Os animo a probarlo con la única precaución de que debéis poner muy poca cantidad dado que se trata de un producto muy aromático.
Aunque poco habituales, se han descrito reacciones alérgicas al sésamo parecidas a las que provocan en algunos los cacahuetes.